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Todos los relatos cortos y personajes de este blog son ficticios. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia

sábado, 21 de septiembre de 2013

Relato: Escuela de ladrones

Este es el ejercicio del facebook de Adictos a la escritura de este mes. No nos poníamos de acuerdo entre dos opciones: el médico dando una mala noticia y la vuelta al cole. Como lo del médico lo veía demasiado fácil (hay muchos manuales), opté por una vuelta al cole peculiar. Ha salido un poco raro, pero no me disgusta...

 Escuela de ladrones

Si había algo peor que volver al colegio, era volver a la escuela de ladrones. Por desgracia, Tomás estaba metido en ambas. En una, porque las autoridades obligaban a todos los niños a ir cada mañana. En otra porque, cegado por la idea de ganar dinero fácil y llevar a cabo una profesión sencilla, se había apuntado voluntariamente.
Había pensado que todo sería robar a la gente rica que no merecía lo que tenía, escapar casi como en un juego de las autoridades y libertad. En cambio, se había encontrado con malos tratos, miedo y amenazas. Para colmo, había pasado su mes libre robando carteras a gente pobre para pagar la inmensa deuda que había contraído con la escuela. No había reunido ni la mitad del dinero que costaba el primer año, y el segundo costaba el doble, pero había oído lo que les pasaba a los que abandonaban.
Así pues, tras una mañana infernal en el colegio de verdad se encaminó hasta la escuela subterránea, maldiciendo el día que se había enrolado y preguntándose si llegaría a pagar la deuda. Por supuesto, ahí estaban los chicos mayores, amenazando a los más débiles. Llegaron incluso a ponerle una navaja en la garganta para exigirle que les diera todo lo que llevaba encima, sabiendo que era toda su recaudación para pagar el curso.
Por suerte, Tomás destacaba por ser muy avispado y ya había anticipado algo así, de modo que le tendió al líder de los matones una bolsa de monedas falsas para que le dejaran en paz y, aprovechando que se había confiado y le había soltado, le birló la suya, que a su vez contenía la recaudación de varios pequeños a los que robaron antes que a él. Antes de que pudiera darse cuenta de que le faltaba algo, él ya estaba en el interior, entregando delante de todo el mundo las dos bolsas.
—Eh, fíjate —dijo uno de los recaudadores al instructor—. Este mocoso ha reunido suficiente para pagar su deuda presente y futura con la escuela.
—Vaya, vaya. Y ni siquiera le han pillado.
—¡Eh! ¡Me has robado la bolsa! —gritó el matón, que entró con la clara intención de partirle a Tomás hasta el último hueso del cuerpo. El instructor le agarró por la ropa y le hizo colgar de su fuerte brazo.
—¿Qué parte de escuela de ladrones no te entra en la sesera? Si te dejas robar por un enano es problema tuyo, pero no pienso dejar que ataques a mis alumnos. Y ahora, dale tu parte al recaudador.
—¡Te he dicho que me la ha robado!
—Una pena. ¿Qué le hacemos a los alumnos que no pagan al menos una parte de la matrícula?
—Expulsión, expulsión —bramaron muchos de los presentes, sedientos de sangre.
El chico intentó huir, pero fue en vano. Tomás cerró los ojos al ver cómo le acercaban el cuchillo mientras de debatía, pero no pudo evitar oír los ruidos.
—¿Veis eso, mocosos? —les dijo el recaudador a un grupo de chicos aterrorizados que habían estudiado con Tomás el año anterior. El niño dedujo que eran aquellos a los que el matón había robado—. A los que lleváis un año os lo perdonamos, porque si no nos quedaríamos sin alumnos. Pero como el año que viene vengáis sin nada... ya sabéis lo que pasará —se giró hacia Tomás—. Tú no tienes que preocuparte ya más que de aprender. Creo que llegarás lejos.
El pequeño forzó una sonrisa, pero interiormente sólo podía pensar: ¿Dónde me he metido? Y, lo más importante, ¿cómo salgo de aquí? Y es que, si algo sabía Tomás, era que tener su deuda liquidada no significaba que le fueran a dejar abandonar la escuela.

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3 comentarios:

  1. hoola! me gustó la historia me pareció original el tema de una escuela para ladrones y me gustaría una continuación!! una pregunta: como elijes el nombre de tus personajes principales?

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  2. Suele ser el primer nombre que se menciona a mi alrededor cuando empiezo el relato, el primero que se me viene a la cabeza... A veces, simplemente tecleo al azar ^^

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  3. Una fuerte dosis de realidad, a pesar de la ficción...

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