Este es mi nuevo proyecto de Adictos a la escritura. Había que elegir una imagen que llevaba aparejado un género oculto y realizar el relato sobre ella. Yo elegí esta:
Resultó ser de género romántico. Al final, esto es lo que ha salido:
La chica de los dulces
Pablo no soportaba a
Verónica. Esa mujer obsesionada con los dulces que iba por la vida
repartiendo sonrisas y magdalenas decoradas con cariño le ponía de
los nervios. Si alguien parecía nervioso, le daba una bomba de
chocolate para que la metiera al micro y se sentara a comerla con
tranquilidad. Si alguien estaba estresado le daba una de esas
galletas de colores. Si alguien estaba deprimido lo arreglaba con un
muffin. Si había una celebración a la vista siempre se presentaba
con una de esas tartas tan elaboradas que daba pena comerlas. Y
siempre tenía a mano pequeños bollos para todo el que quisiera
picar entre horas.
Por supuesto que la
odiaba, ¿cómo no iba a hacerlo? Distraía a todos y no paraba de
meterse en la vida de los demás. Tentaba a Pablo paseando por la
oficina con sus dulces, intentando sin duda comprar su amistad como
había comprado la del resto de empleados y con los jefes. Y encima,
cuando se les acabara el contrato de becarios, le darían el puesto
fijo a ella a pesar de que él se esforzaba más.
***
Verónica sabía que
Pablo la odiaba. Era amable con él, e incluso había llevado un día
una bolsa de galletas sin azúcar pensando que rechazaba sus dulces
porque era diabético, pero cuando se las ofreció sólo recibió una
mirada de desprecio como agradecimiento.
El odio de Pablo era tal
que había empezado a evitarlo, pero cuando a ambos les llamaron al
despacho del jefe no le quedó más remedio que aguantar que la
mirara fijamente con esa tenebrosa expresión en la cara. Al fin, no
pudo más y reaccionó a su energía negativa como siempre:
—¿Quieres una
magdalena?
—No, resérvatela para
sobornar al jefe —gruñó él.
—¿Perdón? —preguntó
desconcertada.
—La semana que viene se
nos acaba el contrato, necesitarás muchos bollos para que te den el
puesto.
—¿Qué puesto? —no
entendía nada.
—¿Qué puesto va a
ser? El que hemos estado cubriendo estos meses. Cuando se nos acabe
la beca, lo cubrirán con uno de nosotros.
—¡No es posible que no
sepas que lo ocupará el hijo del presidente! —se extrañó de que
no se hubiera enterado. Una de las frases que más habían repetido
sus compañeros era "Qué pena que el niñato se vaya a quedar
con el trabajo, con lo maja que eres tú".
—¿Que qué? —preguntó él. No
hubo tiempo para respuestas, porque el jefe les hizo pasar entonces,
precisamente para hablarles de eso.
Pablo parecía hundido
cuando salieron del despacho, por lo que Verónica le ofreció de
nuevo un dulce. Para su sorpresa, no sólo lo aceptó, sino que acabó
dándose un atracón.
—Gracias —dijo al
final. Luego se removió incómodo y añadió—: Lo siento.
—No pasa nada —le
respondió con una sonrisa. La verdad, cuando no la asustaba con sus
miradas de asesino, era bastante guapo.
***
Fue la mejor semana que
habían pasado en la empresa. Hablaron, rieron, comieron dulces.
Cuando se les acabó el contrato, ninguno de los dos soportaba la
idea de no volver a verse más, así que intercambiaron sus números
y comenzaron a verse fuera de la oficina. Poco a poco, por supuesto,
nació un amor muy dulce entre ellos.
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Todas las historias y personajes de este blog son ficticios. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.
Awww que dulce!! Me encanto tu historia =D
ResponderEliminarMe ha encantado Deborah, sencillo, ameno y muy romántico!!
ResponderEliminarFelicidades!!
Tanta dulzura en tan pocas líneas :)
ResponderEliminarEs que no siempre es amor a primera vista, eh?
Muy simpático, me dejó sonriendo.
Abrazos!
Buenas noches, Déborah :)
ResponderEliminarMe gustó el relato, no sólo por el género, sino porque es manifiesto de una regla esencial que todas conocemos: el camino rápido al corazón de un hombre, es su estómago ;)
Un beso,
Ellora
¡Tan dulce! Realmente muy tierno y bonito, me gustó mucho.
ResponderEliminarBesito
Sabía que acabarían enamorándose; los dulces pueden hasta con el más escéptico. Es una pena pero una realidad que ya no se valoren los méritos de cada uno y sí se haga el número de contactos que tengas, por eso odio el favoritismo. Me ha encantado. ¡Un beso!
ResponderEliminarMuy hermoso el carácter optimista de la muchacha y me ha divertido el desconcierto de él al enterarse que el puesto no sería para ninguno, estaba muy ocupado sacando ideas erróneas como para oír los rumores. Felicitaciones :)
ResponderEliminarHola!
ResponderEliminarMuy divertido, de la competencia al amor hay un solo paso, parece.
Saludos!!
Muy romántico y dulce, me ha encantado. Felicidades.
ResponderEliminarHola Deborah: Me gustó tu relato, aunque me desconcertó esta oración
ResponderEliminarCuando se nos acabe la beca, lo cubrirán con uno de nosotros.
Me dio por pensar que debía decir: Cuando se nos acabe la beca, nos sustituirán...
Con mi afecto: Doña Ku
Bueno, al menos esa relación se salvó de ser destruida por la competitividad... Qué encantadora ella, por cierto.
ResponderEliminarBueno, al menos esa relación se salvó de ser destruida por la competitividad... Qué encantadora ella, por cierto.
ResponderEliminarBueno, al menos esa relación se salvó de ser destruida por la competitividad... Qué encantadora ella, por cierto.
ResponderEliminarMuy divertida tu historia, me hiciste sonreír con el atracón final de Pablo, le vino bien endulzarse un poco. Saludos.
ResponderEliminarJejeje me encanta como relatas li huraño que es el al principio. Las falsas impresiones son muy malas, nos hacen juzgar de forma erronea. Unbeso y felicidades
ResponderEliminarMe encantó el caracter de la chica, tan alegre y dulce, y cómo la ve él, desde la envidia y el recelo. Un final sorprendente lo del hijo del presidente (te juro que la rima no fue a posta xD). Y una historia como las reales, de las que se trabaja poquito a poco y con muchas carcajadas. Un relato sencillo, cómodo de leer y nada empalagoso. Besos
ResponderEliminarMe encantó, ligero, rápido y muy dulce,
ResponderEliminarMe habría gustado saber más de como se fue forjando la relación entre ellos, si lo transformas en algo más largo, feliz lo leo =)
Cariños!
Catapzia