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Todos los relatos cortos y personajes de este blog son ficticios. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia

martes, 6 de mayo de 2025

Escapada a Aranda del Duero

Aranda del Duero, provincia de Burgos, es un pueblo muy cuco rodeado por tres ríos, por lo que tiene tres puentes históricos, dos de los cuales fueron lo primero que vimos después de encontrarnos con el resto de nuestro grupo en la Plaza Mayor.
Otra de las cosas por las que destaca es por sus iglesias: no pudimos entrar en la Iglesia de San Juan, que está fortificada, pero sí en la Iglesia de Santa María la Real, que tiene una impresionante portada. El interior no se queda atrás: las escaleras que dan al coro son impresionantes, el púlpito es precioso y el retablo mayor es para quedarse un rato viéndolo.
Iglesia de Santa María la Real y Santuario de la Virgen de las Viñas
Nos entretuvimos bastante hablando con un paisano, pero sobre todo tuvimos un problema con el restaurante: nada más que cuatro horas desde que entramos hasta que por fin conseguimos que nos cobraran.
Debido a esto, el plan inicial de visitar un monasterio cercano tuvimos que cambiarlo por ir al Santuario de la Virgen de las Viñas antes de volver al coche atravesando un precioso parque.
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martes, 29 de abril de 2025

Relato de fantasía: Negocios

Nueva tirada de cartas Fatum, con mi nueva baraja. Lo que salió significa: El protagonista es investigador que experimenta en busca de conocimiento con un espíritu oscuro para revelar la verdad sobre un héroe caído. Tiene una relación romántica con un mentalista y es pariente de la cabeza de una organización criminal. Es un no humano y su origen está en una secta.

Negocios

Tirada de cartas que inspiró el relato
Rat ignoró los gritos de su pareja desde la entrada, sabía que quería que le diera un descanso a su mente, así que se puso unos tapones para aislarse del ruido y bloqueó la puerta de su laboratorio. No necesitaba tanto descanso como los humanos y, de todas formas, no podía permitírselo. 
Estaba demasiado cerca y el espíritu oscuro con el que trabajaba no tardaría en revelarle lo que quería saber, pero si le dejaba recuperar fuerzas volverían a la situación de inicio. No estaba dispuesto. Si lo que sospechaba sobre Laizus era cierto y conseguía demostrar con pruebas irrefutables que no era un héroe caído, su gente dejaría de considerarse una secta y pondría patas arriba a la religión oficial.
Un par de horas después, el espíritu se rindió y se lo reveló todo: la verdadera historia y todo lo que tenía que hacer para demostrarla. Rat lo anotó todo cuidadosamente y, tras desterrar a la criatura de vuelta a su plano, se quitó los tapones, desatrancó la puerta y bajó corriendo las escaleras, gritándole a su pareja que ya había acabado, que por fin podían volver a su vida.
Pero solo le respondió el silencio y, cuando entró en el cuarto de estar, se encontró a su amado decapitado y a su tío Golim y varios esbirros esperándole.
-¿Por qué? -preguntó, en shock.
-Negocios. Me apena que seas tú, pero ya sabes cómo son los sacerdotes. Tú querías remover la mierda de su religión y ellos me han pagado demasiado como para negarles el favor de evitarlo.
-Pero es cierto. ¡Laizus nunca...
Su frase se interrumpió cuando su cabeza se separó de su cuerpo, rodando muy cerca de la de su pareja. Golim miró el cadáver de su sobrino con cierta pena, pero luego dirigió su atención a los papeles que quedaban en su mano y los estudió con interés. Sonrió. Le habían pagado por silenciar a su sobrino y había cumplido. Nadie le había dicho nada sobre destruir esos papeles para que no llegaran a manos inadecuadas. Seguro que...
Tampoco llegó a finalizar el hilo de pensamientos porque entonces su cabeza también rodó. Luego, los que había creído que eran sus fieles esbirros, pagados por los religiosos, agarraron los papeles, los echaron al fuego y se marcharon de la casa en busca de su recompensa.
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miércoles, 23 de abril de 2025

Relato: El planeta como rehén

Un nuevo lanzamiento de dados para hacer un relato, en este caso, con el nuevo lote que me compré ^^.

El planeta como rehén

Dados que inspiraron el relato
Los SFOT eran la élite de las fuerzas de defensa del planeta. Su escudo se miraba con admiración entre los ciudadanos y eran los únicos capaces de enfrentarse a cargueros espaciales amenazadores, de infiltrarse en sistemas enemigos para desbaratar su red de satélites o incluso de destruir planetas enteros que se atrevieran a desafiarles.
El resto de fuerzas militares terrestres les miraban con recelo, pero no podían pasar sin ellos. Su recelo estaba más que justificado: no tenían rival y se creían superiores, así que empezaron a meterse cada vez más en la política. Pronto se dieron cuenta de que no hacían falta las sutilezas. Tenían al planeta entero como rehén. Si los políticos no hacían lo que querían, podían bloquearlo y detener el comercio interplanetario de inmediato.
Se sentían tan seguros de su superioridad que no pensaron siquiera en que sus armas no valían para luchar a pequeña escala ni su inteligencia podía combatir las conspiraciones dentro del propio planeta al que supuestamente protegían. 
Por eso, cuando los demás militares quisieron deshacerse de su dictadura, buscaron otro enfoque. Soltaron a un reptil gigante fuera de la sede de los SFOT. Las fuerzas de élite no tenían armas de pequeño calibre y atacar a la bestia significaba destruir no solo su base, donde residían sus familias, sino miles de kilómetros a la redonda de la misma. Solo pudieron observar, impotentes, cómo destrozaba las naves que quedaban en tierra y aplastaba los edificios y a todo el que se pusiera en su camino.
Nunca llegaron a saber que la bestia había sido soltada por los mismos salvadores terrestres que rescataron a sus familias. Por eso permitieron que acogieran a los supervivientes, lo que les dio vía libre para lavarles el cerebro y para ir haciendo lo mismo con los SFOT que estaban de permiso y bajaban a tierra para visitar a sus seres queridos.
Pronto, salvo algunos pocos SFOT que se habían dado cuenta de lo que pasaba y huyeron para convertirse en piratas espaciales, toda la élite quedó compuesta por hombres sin voluntad al servicio de las fuerzas militares terrestres. Estas se dieron cuenta de que ahora tenían al planeta como rehén y que los políticos debían hacer lo que ellos quisieran, cambiando unos tiranos por otros.
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miércoles, 9 de abril de 2025

Escapada de dos días en Salamanca

Ya había estado antes en Salamanca, pero nunca en modo turista. Había visto muchas cosas, pero sin ninguna clase de contexto. Me propuse cambiar eso y organicé un plan para ver lo máximo posible en solo dos días. ¡Hay que estar atento a los horarios para optimizar! La visita fue muy intensa y cundió un montón, no paré un segundo.

Día 1: tours, Escuelas Mayores y convento de San Esteban

Para el primer día lo primero que hice fue poner dos tours. El primero, casi nada más bajarme el tren, era un tour por los clásicos de Salamanca: plaza Mayor, casa de las conchas, clerecía, algún palacio, las Escuelas Mayores y las Escuelas Menores de la universidad y las catedrales. La guía la hacía muy bien y nos metió en todos los sitios donde podíamos entrar de forma gratuita, algunos desconocidos como El cielo de Salamanca en las Escuelas Menores. Además nos dio algunos vales y una herradura de la suerte al finalizar. 
El tour de leyendas era a eso de las siete de la tarde, y además me habían dicho que las Escuelas Mayores de la Universidad abrían gratuitamente los lunes por la tarde, así que nada más abrir ya estaba yo en la puerta para verlas. Es una auténtica maravilla, aparte de que conserva las aulas casi tal y como estaban, tiene muchísimos puntos de interés y es historia viva. 
Fachadas de las Escuelas Mayores de la Universidad de Salamanca y del convento de San Esteban
Fachadas de las Escuelas Mayores de la Universidad de Salamanca y del convento de San Esteban
Todavía tenía mucho tiempo hasta el tour, así que me fui al convento de San Esteban, ya que no me daba tiempo a ir a la catedral. Ese convento también es una auténtica maravilla y la iglesia es increíble. No se menciona entre los imprescindibles, pero hazme caso: lo es.
Después seguía teniendo algo de tiempo, así que fui a un par de puntos gratuitos que nos habían dado en un flyer: un museo de filigrana y trajes tradicionales que era una sola sala, pero que no dejaba de ser interesante, una cata de productos y una tienda donde podías coger un detalle. 
El tour de leyendas estuvo genial. La guía era una gran narradora y nos llevaron por sitios un poco distintos de los de los tours tradicionales, como la cueva de Salamanca o algunas casas con leyendas asociadas, el huerto de Calisto y Melibea. Acababa justo a la hora de cenar y ya no había nada abierto, así que di por finalizada la jornada.

Día 2: Clerecía, Casa Lis, Catedrales, convento de las Dueñas y Palacio de las Salinas

Aquí tuve que hacer malabares con los horarios. La Clerecía tiene subida a las torres gratis el martes por la mañana, así que hice la visita guiada y luego subí. Merecen la pena ambas cosas, es un edificio muy interesante que sigue en uso con la universidad privada.
Después fui a Casa Lis, un edificio modernista que tiene un museo de art decó y todo tipo de piezas (desde juguetes hasta cerámicas) de la época. Solo por entrar al edificio merece la pena, porque es precioso por dentro. Además, tiene piezas interesantes y la cartelería proporciona bastante información.
La siguiente parada fueron las Catedrales. Aquí hay dos entradas: la de las torres y la de las catedrales en sí.
Catedral desde el huerto de Calisto y Melibea, Torres de la Clerecía desde el patio de la Casa de las Conchas y Claustro del convento de las Dueñas
Catedral desde el huerto de Calisto y Melibea, Torres de la Clerecía desde el patio de la Casa de las Conchas y Claustro del convento de las Dueñas

Lo primero que hice fue subir a las torres de las Catedrales, porque amenazaba lluvia. Normalmente, no suelo pagar por subirme a una torre, y menos cuando ya me había subido a una esa misma mañana, pero me habían insistido mucho en que merecía la pena y es cierto. No es una subida y ya, se trata de un recorrido en el que pasas por las zonas altas de ambas catedrales y puedes pasear por el tejado. Me gustó mucho.
Después, pagué la entrada a las Catedrales. La visita se hace con audioguía y esta me pareció muy completa, ya que va capilla por capilla. Empieza en la Catedral Nueva (espectacular) y continúa por la Catedral Vieja (que no carece de encanto, con su estilo medieval) y su claustro.
La entrada también incluye el Palacio Episcopal, que tiene un museo muy curioso con obras diversas, desde el medievo hasta nuestros días.
Acabada la visita, me fui al Convento de las Dueñas, que abre una hora por las tardes y que tiene un pequeño museo, aunque la principal atracción son los espectaculares capiteles de su claustro, cada uno con un motivo distinto y todos muy trabajados.
Aquí ya me quedaba sin tiempo antes de ir al tren, pero todavía tuve tiempo para una visita rápida más al patio del Palacio de la Salina. Había una exposición, pero estaba cerrada, así que ya di por finalizada la visita a Salamanca y volví a casa.
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